EL FUMADOR Y SUS VAPORES (Con respecto a la ley antitabaco)

A bordo de un tren, un hombre y una mujer viajan en el mismo compartimento. En el camino, el hombre empieza a sentir calor. Se quita la corbata. Un poco después, la chaqueta. Luego se quita la camisa e incluso, el pantalón y los calcetines. En cosa de un instante, está completamente desnudo y la pasajera, más que disgustada, se halla al borde de un ataque. Es entonces cuando el hombre saca un cigarrillo de la bolsa de su pantalón y, antes de encenderlo, se dirige cortésmente a su compañera de viaje: "Señorita, ¿le molesta el humo?

En verdad no sé porqué, pero esta historia me parece profunda... Versa sobre la calidad de comunicación entre nosotros... Sucede que nos conducimos de un modo totalmente inconsciente y pronto, por acto reflejo, por costumbre, decimos una cosa tan banal como: ¿Le molesta el humo?
Es como si todas las torpezas, las faltas, las metidas de pata, etc., que hubiésemos cometido antes ya no existieran...No tenemos conciencia de la manera en que nos comunicamos.

Texto tomada del libro: La sabiduría de los chistes (historias iniciáticas) de Alejandro Jodorowsky