martes, 17 de julio de 2007

SUENA EL CASCABEL

En un medio socio – cultural adverso a la libre y sana incidencia de Sujetos emergentes capaces de crear nuevos rumbos, sentidos e imaginarios al panorama social, generadores de nuevas dinámicas y soluciones para la colectividad. En un sistema socio – económico que construye individuos bajo condiciones sociales y educativas que los mantienen atados al condicionamiento del consumo, del miedo, de la calificación, de los medios de información masiva, del prejuicio, de la Fe ciega, del entretenimiento efímero, de la identidad pasiva e indiferente y al dominio inconsciente de quienes los dirigen. Este espacio surge con miras a la toma de conciencia como alternativa.

Toma de conciencia que parte del si mismo, que se reinventa una y otra vez y que recupera al medio de las manos de la simulación, la inercia, la unidimensionalidad y la enajenación. Donde la voluntad individual se convierte en la capacidad de decisión de aceptación y rechazo que cada quien tiene para hacer frente desde su trinchera, la cual no es mas que el entorno que comprende al espacio privado, donde se encuentran las bases de todos los hábitos, costumbres, el consumo y donde se sustentan las ideologías de control, rezago y fragmentación.

Toma de conciencia que va mas lejos y se encuentra antes de salir a las calles a protestar y que tambalea todo el estilo de vida acostumbrado, impuesto, comprado. Voluntad de cada quien por dar un respiro a la propia humanidad, por APAGAR LA TV, por APAGAR LA RADIO, por frenar la inercia y analizar los discursos que nos atraviesan al pensar y hablar con los demás. Se trata de proteger los sentidos, lo que entra a través de ellos en la medida que es viable. Es ahí donde radica la posibilidad de reconstruir al medio, recuperando la personalidad, a partir de uno mismo, para partir con los demás.

Participación social que va mas allá de un voto dentro de un acostumbradamente truqueado sistema democrático, y si se quiere ir mas a fondo, en una entidad como el estado de Hidalgo donde la evolución de la conciencia civil y colectiva así como el desarrollo social de la mayor parte de la población queda en el fango; y que tiene como reflejo el deplorable y nefasto escenario político y electoral del estado. Sus gobernantes y su burocracia insertados en instituciones diseñadas siempre y de antemano siguiendo discursos que vienen de afuera para seguir las lógicas de la hegemonía política mundial hoy neoliberalista, que aplastan a los pueblos del mundo al hundirlos en la pobreza global.

Por ello se aspira a la creatividad para rebasar aquellas instituciones encargadas de enmudecer a la población al mantenerla en el mismo estado para seguir siendo fuentes de su retroalimentación dentro del círculo vicioso que hasta ahora reproduce y es esencia de las problemáticas sociales, ambientales, políticas, económicas, que vive el mundo contemporáneo.
El Cascabel se suma y se abre a los esfuerzos que tantos inician en búsqueda de la reconstrucción del medio, mirando en el horizonte social hacia nuevos intentos e ideologías generadoras de nuevos comportamientos con los demás por medio de nueva participación social constante, de todos los días y en todos los espacios que deriva en el renacer de una nueva cultura. En tiempos de entendimiento del estado de las cosas como un todo; participación que se inicia conversando, alzando las palabras y las ideas desde los espacios y hábitos mas elementales de cada quien.

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